Iba cruzando la calle llorando, un taxista me empieza a silvar, me doy vuelta empiezo a putearlo Y SALTA OTRA MINA A BARDEARLO CONMIGO. tenía pañuelo verde colgado, nos miramos y nos sonreímos. Estamos juntas, en cada calle, en cada esquina. De tener un día de mierda, paso a ser