Hoy, a mis 22 años, desde que empecé a desarrollar un TCA a los 14 (que superé a los 19) vuelvo a tener sobrepeso. Y he de decir que lo he pasado mal, puesto que la cicatriz de la anorexia me decía que "estar gorda" era lo peor que podía pasar, pero la verdad...no es para tanto.