Vivimos tiempos bien jodidos. Los activistas de pandereta que llevan años denunciando represiones imaginarias en base a derechos inexistentes ahora agachan la cabeza y aplauden cuando les revientan todo el sistema jurídico y les plantan una dictadura de un plumazo.
La vacuna te hiperinmuniza de un modo perpetuo y definitivo a partir del décimo cuarto día de la administración de la tercera dosis, siempre y cuando sigas llevando mascarilla, te inocules mensualmente las dosis de refuerzo, evites el contacto humano y no salgas de casa nunca más
Uno de los espectaculares premios que han adquirido los vacunados con el pasaporte COVID es la posibilidad de seguir disfrutando momentánea y condicionalmente de derechos elementales que ya poseían.
Me parece muy feo insinuar que las inoculaciones están causando problemas cardíacos cuando ya tenemos evidencia suficiente como para poder afirmarlo con rotundidad.
Vosotros sois muy jóvenes y no lo recordaréis, pero hubo en tiempo en el que el gobierno nos decía con cuántas personas podíamos reunirnos en nuestra puta casa.
No entiendo qué necesidad hay de mandar tropas armadas a un conflicto militar cuando enviando a un par de niños no vacunados ya conseguirías diezmar a toda la población del país en una semana.
Estimado señor:
Hemos observado que todavía no ha acudido a su centro de intoxicación para inocularse la tercera dosis. Le recordamos que si no lo hace en los próximos días le retiraremos el carnet de esclavo ejemplar y pasará a formar parte de la miserable subraza negacionista.
Un grupo de individuos que controla casi la totalidad de recursos del planeta asegura que vienen tiempos de escasez y que ellos no son los responsables.
Siempre a favor de confinar a los antivacunas en una isla fuera del sistema para que no puedan gozar de los avances de nuestra civilización como los impuestos, las terapias experimentales obligatorias o nuestro eficiente, eficaz y transparente entramado político-jurídico.
Lo que más me gusta de la democracia es cuando te dicen que el poder emana del pueblo porque una vez cada cuatro años puedes escoger entre varios tiranos financiados por los mismos en unas elecciones amañadas.
Antes para que te llamaran antivacunas como mínimo tenías que decir que provocaban aut1smo. Ahora basta con expresar tus dudas sobre la eficacia del toque de queda.
Hay que recordar que este virus tiene un comportamiento muy extraño y se propaga mucho más deprisa que cualquier otro. Además puede flotar en el aire durante décadas, respeta platós de televisión y algunas fronteras políticas y es implacable durante la noche y en fiestas privadas
Apasionante final de temporada 2021 en la competición mundial entre gobernantes para ver quién consigue violar más derechos fundamentales y se alza con el título de dictador del año.
¿A vosotros qué vacuna os ha tocado? ¿La del cobarde que sucumbe a la presión social, la del ingenuo que cree que con ella le dejarán viajar o la del estulto irrecuperable que todavía cree en esta farsa?
¿Cómo van a confabularse los principales multimillonarios del mundo que controlan todos los bancos, países y medios de comunicación para armar un plan que les permita perpetuarse en el poder?
Le recordamos la importancia de mantener correctamente actualizado su carnet de esclavo si quiere seguir gozando de sus derechos elementales al amparo de nuestra pseudolegalidad ficticia.
No permitáis que vuestros familiares negacionistas compartan cena con vosotros durante estas entrañables fiestas navideñas y enturbien el ambiente al recordaros lo cobardes y colaboracionistas que sois.
El pasaporte verde es una medida excelente para que todos los aprendices de dictador politraumatizados puedan compartir todo su veneno emocional disfrazándolo de solidaridad.
Si todavía no os habéis inyectado la tercera dosis sois oficialmente ratas negacionistas NO VACUNADAS que colapsan las ucis con su infinito egoísmo anticientífico.
En las películas los protagonistas son capaces de soportar torturas inenarrables con tal de no delatar a un compañero. En la vida sacrifican a sus hijos para que no les miren mal en el trabajo.
Acordaos de llevar al día vuestra pauta de vacunación para que cualquier hostelero cobarde y corrupto os permita contribuir al apartheid en su local de mierda.
Lo típico que estás jugando un partidillo de fútbol con tus colegas recién inoculados y el juego se interrumpe constantemente a causa de los mareos, los desmayos y los infartos fulminantes producidos por el puto cambio climático.
El certificado Covid para acceder a espacios públicos es una medida IMPRESCINDIBLE si queremos acabar de una vez por todas con el maldito Estado de derecho, condenar al oprobio a los irresponsables negacionistas e instalar, por fin, nuestra ansiada dictadura del terror.
El mejor márketing de la historia:
Las farmacéuticas han conseguido que te sientas un héroe por inyectarte su veneno, que repitas dosis aunque enfermes, que defiendas a muerte su producto y que ataques a todo aquel que las cuestione.
Sé que hace mucho calor, que ya estáis vacunados y que no es obligatorio llevarla por la calle pero, por favor, seguid usando la mascarilla siempre. No sé si soportaríamos tener que volver a ver vuestras caras de cobardes.
¿Tanto os cuesta confiar en la ciencia, colocaros una venda en los ojos y dejaros llevar por lo que digan unos magnates megalómanos con kilómetros de antecedentes penales?
Imagino que todos aquellos que argumentan que el bien común debería prevalecer sobre los derechos individuales estarán de acuerdo con exterminar a discapacitados, ancianos y pensionistas por el incalculable daño que están generando en nuestras economías.
El pasaporte verde es una medida excelente para señalar a ese grupo de miserables que pone en peligro al resto de la sociedad con su acatamiento sumiso de las medidas dictatoriales del gobierno de turno.
Por favor, no nos relajemos si no queremos que la octogésima novena ola nos pille con la guardia baja. Recordad cambiar vuestra cuádruple mascarilla cada 11 minutos, ducharse 33 veces al día con gel hidroalcohólico y vacunarse mirando a la sede de la OMS. SENTIDO COMÚN.
Las autoridades no alcanzan a comprender las causas por las cuales algunas personas rechazan someterse a un tratamiento génico potencialmente letal y publicitado mediante amenazas para aminorar los síntomas de una supuesta enfermedad que no padecen.
Vosotros sois muy jóvenes y no lo recordaréis, pero hubo un día en que los camioneros hicieron una huelga para protestar por el precio de los carburantes y consiguieron con sus protestas que todavía los subieran un poco más.
Una de las ventajas de este cielo anaranjado es que la NASA podrá seguir filmando sus falsas misiones a Marte en descampados andaluces si necesidad de pasar por posproducción.
Cuando estás en el colegio, en tu arrogancia juvenil, crees que lo que te están enseñando no te servirá nunca para nada. Luego de mayor, con el saber que da la experiencia, por fin descubres que estabas jodidamente en lo cierto.
El globalismo ha conseguido que cualquier papanatas se sienta poco más que un héroe por haber estado 10 días encerrado en su casa con una PCR positiva y sin ningún tipo de síntoma.
Cuando dicen que van a subir los precios de los peajes para proteger al medio ambiente es como si un atracador te dijera que va a sustraerte todo tu dinero para evitar que te lo gastes en vicios.
¿Se sabe ya quién ha sido la rata negacionista en cuyo interior se ha gestado la nueva subvariante Delta Disney Plus Ultramarinos Manoli que sólo afecta a vacunados con la pauta completa?
Si os concentráis durante unos cuantos minutos en lo más profundo de vuestro corazón podréis llegar a sentir el cálido abrazo del gobierno preocupándose por vuestra seguridad.
Si cierras los ojos, te concentras lo suficiente y agudizas al máximo tus oídos puedes escuchar la rueda del karma dando sus últimos giros antes de empezar a aplastar a toda la mafia satánica que nos gobierna.
Vacunarse es seguro (como negocio) y necesario (para someter a la población). Es un acto de solidaridad (hacia la economía de las farmacéuticas) que además te protege a ti mismo (del pensamiento crítico). Vacúnate (obedece). Yo me vacuno (cede a la presión o serás excluido).
Las autoridades te advierten de que podría haber un apagón mundial no provocado que nos dejaría sin suministros y que, en lugar de pedirle responsabilidades a las instituciones, la solución pasaría por seguir obedeciendo mientras aplicamos protocolos de subsistencia paleolíticos.
Ahora resulta que dudar de la buena fe de los gobiernos y de las empresas que hacen negocios multimillonarios con la salud de los ciudadanos es propio de tarados sectarios que niegan la realidad y el progreso científico.
Exponer un hecho evidente y ampliamente probado antes de que las instituciones y los medios de comunicación lo reconozcan se denomina "teoría de la conspiración".
Unos pocos antivacunas anónimos y desorganizados acosan brutalmente a farmacéuticas multimillonarias que controlan el mundo con una retahíla de mensajes criminales en los que defienden su libertad para no inocularse.
Acabo de conseguir que un ultracovidiano de doble bozal pase voluntariamente 40 minutos sin mascarilla en un tren abarrotado de gente tras comerle la cabeza con repugnantes métodos de manipulación psicológica.
Querido esclavo:
Le recordamos que usted ingresó voluntariamente en nuestro redil y que puede abandonarlo cuando quiera, siempre y cuando sea capaz de burlar la pegajosa telaraña psicosocial que llevamos tejiendo durante milenios tanto dentro como fuera de usted.
❌No, nunca hubo una campaña en contra los no vacunados.
Sólo hubo una sucesión coordinada y premeditada de acciones coactivas contra un grupo social orquestada desde los poderes fácticos con finalidades punitivas.