–Bájense los alquileres un 40% por ley. +Pero entonces los propietarios no van a poner sus viviendas en el mercado. –¿Y qué van a hacer con ellas? ¿Van a tenerlas vacías sin rentabilidad alguna? Póngase un impuesto a las viviendas vacías para hacer esta opción todavía menos deseable. +Las pueden poner en el alquiler turístico –Pues prohíbase el alquiler turístico. +Entonces las van a poner en el alquiler de temporada. –Como la demanda de alquiler de temporada no va a aumentar mágicamente, tendrán que hacerlo en fraude. Aplíquense sanciones ejemplarizantes a la utilización del alquiler de temporada en fraude. +Entonces las van a vender. –Perfecto, que el Estado las compre y así vamos a tener un parque público de alquiler social mucho más rápido que si hubiese que construir viviendas. +Eso va a matar la inversión inmobiliaria en España. –¿Y para qué queremos inversión inmobiliaria si hay 3,8 millones de viviendas vacías (1 millón de ellas en grandes ciudades y zonas tensionadas), al menos 350.000 pisos turísticos que podemos forzar que se pongan en el mercado del alquiler a precios regulados y quién sabe cuántos alquileres de temporada en fraude? +Venezuela, Galapagar, comunismo.