Iván Serrano Jauregui
3 years
Ya no defiendan al presidente, no defiendan a ningún político. Si por ellos fuera, lo mejor sería que no existieran periodistas, activistas, quejosos, críticos y ninguna persona que les cuestione.
Son sanguinarios, soberbios y dan mucha mucha pena.
Qué miedo vivir hoy en México