![en una lejana playa del animus. ☭. Profile](https://pbs.twimg.com/profile_images/1878724619240177664/ZnGG31JQ_x96.jpg)
en una lejana playa del animus. ☭.
@_cr118
Followers
237
Following
20K
Statuses
7K
Te propongo el sur. Conservadon't.
Iximulew
Joined March 2019
RT @edu_phaseolus: ¿Cuándo los comités de huelga han dicho algo por los compañeros en el exilio? ¿Cuándo los comités de huelga han dicho al…
0
92
0
RT @sololalucy: El tema es que si dejamos que los comités ganen aceptación, nos pizamos, se necesitan espacios de juego, de convivencia, de…
0
3
0
RT @sofrikitona: Los de universidades privadas siempre van a hablar de la San Carlos con complejo de “salvadores”. Sus opiniones la mayoría…
0
7
0
RT @alejomantillaq: Veo a alguna propagandista muy molesta porque en sus clases debe leer a Marx. Marx tiene el estatus de clásico. Como…
0
147
0
único
En la década de 1950, Puerto Rico enfrentaba los estragos del racismo estadounidense, y la discriminación era brutal. En este contexto, Bobby Capó halló la inspiración necesaria para componer ‘𝗘𝗹 𝗡𝗲𝗴𝗿𝗼 𝗕𝗲𝗺𝗯𝗼́𝗻’. Un recordatorio amistoso de cómo nació este clásico: Según relató el propio ‘Yoyo Boing’, cuyo nombre de pila era Luis Antonio Rivera, la inspiración llegó a Bobby Capó una noche a finales de 1957. Por aquel entonces, ‘Boing’ se presentaba en el Teatro Puerto Rico, al sur del Bronx, en Nueva York, junto al también comediante Paquito Cordero. En su rutina incluía dos chistes de su autoría que, sin imaginarlo, se convertirían en dos grandes éxitos de la música puertorriqueña: ‘El Negro Bembón’ y ‘El Caballo Pelotero’. Aquella noche, Bobby Capó asistió al espectáculo y, al terminar, se reunió con Tommy Muñiz y los dos comediantes. Los cuatro fueron a cenar a una cafetería cercana, donde Capó elogió el ingenio de ‘Boing’ y expresó su deseo de convertir en canciones dos de sus chistes. Fue entonces cuando tomó una servilleta de papel y comenzó a escribir la letra del número que consolidaría la popularidad de Cortijo y su Combo: ‘El Negro Bembón’. Días después, Capó presentó la canción a Rafael Cortijo, quien estaba inmerso en su siguiente producción. Finalmente, el tema quedó inmortalizado en la sesión del álbum ‘Baile con Cortijo y su Combo’, grabado en febrero de 1958. Con la inconfundible voz de Ismael Rivera, la guaracha cobró vida como un cuento musical que resonaría por generaciones, marcando un capítulo inolvidable en la historia de la música puertorriqueña y, en general, de la música latina.
0
0
0