Hay pocas reglas en casa, pero las que hay se cumplen.
Hoy el peque (casi 11) la ha liado parda, hemos tenido bronca, charleta y llantos (los dos).
Hace un rato me ha dicho: Me caes mal.
-Pues lo siento, pero no estoy aquí para caerte bien, soy tu madre, no tu amiga.
Puta vida.