No saben la frustración horrible de vivir en un país que no te brinda la seguridad de poder surgir profesionalmente y económicamente y poder crecer como persona.
Una foto mía de cuando tan solo era una criatura de pocos centímetros de alto.
A ese niño del pasado le digo, todo lo que te ha tocado vivir y soportar, aquí estás ahora siendo un hombre, profesional, con principios y bonitos sentimientos dispuesto siempre a ayudar al prójimo.